martes, 20 de enero de 2015

Sobre la crisis del argentino

Bueno.... qué pienso de todo esto?.
1- Este país se fue a la mierda. Pero no necesariamente por los gobernantes, ni tampoco por la oposición (hablando literalmente, de los políticos). No. Este país se fue a la mierda por la gente. Entre ayer y hoy lo único que vi son comentarios ciegos llenos de bronca y odio. De un lado, los que llaman asesina a la presidente. De otro, los que explican que el tipo se mató porque era un mentiroso. Yo les pregunto a los dos lados lo mismo.... QUÉ PUTA SABES VOS???? Ni vos, ni yo ni ninguno de nosotros, los papafritas donnadies del país sabemos qué sorchos pasó. Por qué estás tan seguro de lo que decís? Tenés pruebas irrefutables? Si es así, por favor, llevalas a la fiscal que investiga el caso, para iluminar el mismo. Si no es así, y sólo vociferas a los gritos tu opinión personal, entonces, no exijas que el resto esté de acuerdo con lo que decís. Va para ambos lados. No jodan, nadie sabe.
2- Todos están intentando sacar una tajada de esto. La presidente, poniendose en víctima, los aspirantes, acusando y pidiendo esclarecimiento. No sea papafrita, lea entre líneas. Les chupa un huevo quién y como se murió. Lo único que importa acá es a quién puedo perjudicar, y cómo me puedo salvar yo.
3- La sociedad está más fracturada que nunca. No hay una fisura social... hay un abismo entre uno y otro lado. Si no se puede hablar con otra persona sin que te juzgue ya sea como gorila cipayo vendepatria o como ciego compradordehumo kk, entonces, no se puede hablar de nación. No somos una nación. Nación se define como "conjunto de personas de un mismo origen étnico que comparten vínculos históricos, culturales, religiosos, etc., tienen conciencia de pertenecer a un mismo pueblo o comunidad, y generalmente hablan el mismo idioma y comparten un territorio". Evidentemente, no somos todos del mismo pueblo. Tanto para unos como para otros, el del frente, no es argentino. Ser "argentino" pareciera ser una cualidad que los llena de orgullo a todos, excepto cuando se habla de todos los demás habitantes de la República, que, obviamente, no son tan argentinos como uno.
4- La violencia sólo genera.... más violencia. Como "el otro" está equivocado y es un ignorante que sólo sigue los lineamientos que le bajan de arriba (léase, en un caso, el oficialismo, y en otro, clarín, EEUU o el que esté de turno hoy) y que no piensa por sí mismo (ay! cuántos de nosotros podemos decir que realmente pensamos por nosotros mismos, formamos nuestra propia opinión, sin dejarnos influir!) la única forma de tratarlo es insultarlo. Esto genera una respuesta que es más o menos la misma. Otro insulto, otra puteada, otra agresión, una amenaza, otra amenaza, esta vez, más grave.... Y así estamos.
5- Nadie piensa en la gravedad de lo que dice. Por un lado tenemos a una mochila de gente diciendo que un ser humano se mató porque era un cobarde, un mentiroso, un traidor, un loquesea... esa misma gente que había mandado mensajitos diciendo "con Cristina no" "te vamos a cagar a trompadas en el congreso" "vamos a ir con los tapones de punta". Por otro lado tenemos a gente que esta convencida al 100% que si no le disparó la Cristina, por lo menos le puso la bala en el arma. Y la acusa de homicidio. # CFKAsesina fue TT a nivel global. ¿Alguien se da cuenta de la gravedad de todo lo que están diciendo?
6- Las banderas en las que se enfundan no son más que trapos. Todo pensamiento político en el que se embanderan murió antes de los 90. Y estamos en el 2015 queridos compatriotas. No existen más los partidismos. Existen sólo los personalismos. Creer que todos los peronistas siguen la misma bandera es creer en cuentos de hadas. Creer que sigue existiendo lo que alguna vez fue el partido radical sólo porque sigue existiendo la bandera, es ser ingenuo. Creer que los ideales de los partidos de izquierda podrían prosperar en un país que siempre siguió (y sigue) los designios de los países más capitalistas del mundo es simplemente ridículo. Señores, basta de la bajada de línea. Piensen por sí mismos. Uno puede tener todos los ideales que alega tener la bandera que está enarbolada en frente, pero eso no significa que todos los que se ponen la bandera tienen tus mismos ideales.
Por último, para no amargarme más. Le hago una pregunta a Ud. que se llena los dedos de teclas tipeando puteadas al otro lado de la verja.... ¿Quién cree Ud. que va a salir perdiendo de todo esto? El gobierno? Los aspirantes? Los medios de comunicación? No señor! De acá los únicos que salen dañados somos tooooodos nosotros, todos los argentinos. De uno y otro lado. Porque nos merecemos justicia, nos merecemos verdad y nos merecemos, ante todo, identidad. Identidad de argentinos. Identidad de pueblo. Y eso es lo único que no somos. No somos pueblo. Somos una masa de influencias que vamos para donde nos tira más el viento.

martes, 4 de noviembre de 2014

Vida nueva

Nos casamos!!!!
Tuvimos la mejor fiesta que nos podríamos haber imaginado, la pasamos genial y la verdad es que no le cambiaría nada a esa noche!


Nos fuimos de luna de miel a Bariloche... donde nos re cagamos de frio, nos bautizamos de nieve, nos divertimos a montones, paseamos como locos y disfrutamos como nunca...


Y allá en Bariloche.... nos relajamos un poco... y nos trajimos un souvenir de esos que no nos vamos a olvidar jamás...


Así que así estamos....
  estrenando una vida nueva, esperando una nueva vida....

y por sobre todas las cosas...

 muy, pero muy felices!


viernes, 23 de mayo de 2014

Sobre el amor no sé nada

Hoy faltan exactamente 119 días para el gran día en que Javi y yo nos vamos a dar el sí ante nuestras familias y ante la ley. Porque el sí entre nosotros, nos lo damos todos los días, varias veces por día, en cada beso, en cada abrazo y, obviamente, en los choques, puteadas y discusiones.
El sí que nos damos es la elección consciente de cada día de saber que esa es la persona con la que querés todo.

Mirando para atrás, a todas las relaciones pasadas... me doy cuenta de que todas las porquerías que uno lee y dice sobre el amor es una vil mentira. (En estos momentos, me gustaría encontrar una traducción más exacta del término "Bullshit")


  • Es mentira que uno busca el amor.

Já!
Uno puede decirse a sí mismo y al mundo que está buscando EL AMOR (♫Ando buscando un amor♪ por todas partes♫) pero eso es una mierda que nos decimos para hacernos creer que de alguna manera tenemos control sobre esto.
Y la verdad más pura es que no tenemos una mierda de control.
El amor llega, te guste o no te guste, cuando tiene que llegar. Ni antes, ni después.


  • Es mentira que podés hacer cambios en vos que van a hacer que tu pareja funcione.

En primer lugar, si tu pareja te ama... te va a amar con todos los defectos y virtudes que tengas. Podés ser la mujer más hinchapelotas del universo (creéme que conozco un par) y te va a amar igual.
Si "necesita" que cambies, olvidate. Eso no va a funcionar.
Ojo... no estoy diciendo que podemos ser las más hinchapelotas del universo... obviamente que la relación se desgasta si uno de los dos es el que siempre cede.... lo que digo es que cuando algo funciona, no necesita un cambio consciente en alguno de los dos. El "give and take" de una relación que funciona es sutil, equilibrado.


  • Es mentira que el amor duele.

Nos hacen creer que el amor duele, que el amor te hace sufrir. Y como pelotudos que somos, intentamos que las relaciones funcionen, bancándonos cosas que no hay por qué bancarse. Sufriendo como idiotas porque "el amor duele".
El amor no duele. El amor te desarma, te rompe en mil pedacitos y te hace de nuevo. El amor te hace emocionar, te hace sonreir, te hace llorar. Pero no duele.
Lo que duele es el ego. Te duele el ego porque esperás que el otro sea como vos querés que sea y no como es. Te duele el ego porque la otra persona es independiente de vos, por más que se amen.


  • Es mentira que el amor hace que la vida sea color de rosas.
La vida... lo que se dice la vida... te toca como te toca. Las cartas se dan y no se puede volver a barajar.
El amor lo que hace es que en esos momentos oscuros, cuando estás en lo más profundo de lo profundo... no estes solo. El amor no pinta la vida de otro color... lo que hace es que la ilumina desde otro ángulo.


Lo único que sé de verdad sobre el amor, es que existe. 
Que me encontró. 







viernes, 11 de abril de 2014

Organizadora de evento

En los próximos meses es muy probable que lo único de que hable en el tiempo en que no esté trabajando y/o durmiendo, es en la organización de nuestra boda.
En aras a poder organizar dicho evento, he enviado muchos mails solicitando presupuestos a diferentes empresas que proveen servicios relacionados con el mundo de las fiestas y los eventos.
Después de muchos llamados y, debo admitir, bastantes broncas, he llegado a la siguiente serie de conclusiones:

1- Las empresas organizadoras de eventos ganan MUCHA plata. Cuando digo mucha, es realmente mucha. Onda, tres o cuatro salarios de familia en un día. Y de familia bicéfalas, nada de una cabeza de familia, los dos laburantes! (Sin contar el costo de la tarjeta por persona)

2- Mucha de la gente que trabaja para dichas empresas debe pensar que la gente que los contrata es bastante estúpida. Y tal vez analfabetos matemáticos.
La tarjeta vale 250, pero es sin vinos. Los llevan ustedes. Nosotros cobramos 12 por tarjeta para descorcharlos. O SEA, LA TARJETA TIENE UN MÍNIMO DE 267. Ehhmmm no, lo que pasa es que cuando uno afina el lápiz para tener una tarjeta accesible, debe sacar ciertos servicios. BUENO, Y SI LOS DESCORCHA CADA UNO EN LA MESA?. Ehhmmm no, no se puede.
No me mientas!!! Qué ganás con que después de que me mandás un presupuesto falso yo tenga que llamar o ir a visitarte para que me des uno verdadero??? Me hacés perder tiempo y plata papá!! Plata que podría gastar en pagar tu descorche, pero por mentiroso no te contrato!

3- Algunas páginas de dichas empresas dicen "SOLICITE PRESUPUESTO SIN CARGO" (y automáticamente les manda un mail) y luego, cuando les solicitas el presupuesto sin cargo, haciendo click en el botoncito, que les manda el mail automáticamente, te contestan (también automáticamente): "No hacemos presupuestos online, comunicarse al xxxx"
Mestasjodiendo????

4- Hay menús que realmente te dan ganas de huir.
Una de las opciones que nos ofrecieron tenía: langostinos, pavo, cordero, caviar (rojo y negro), conejo y pato. Tooooodo eso.
Capaz que la groncha soy yo, pero si en una fiesta hay todo eso junto... me parece que están tratando de compensar algo...

5- Hay otros meús que te dan hambre. HDP, no pongan fotos de la tabla de fiambres... mmmmmm...

6- La capacidad de los salones, es oooootro tema.
"Este salón es para 180 invitados". Si, claro, 180 a cococho!!!!

7- Todo es caro.
Los precios cuidados no existen en el mundo de las fiestas y los eventos.

Torta de casamiento? Sí, claro 200 el kilo... calculale 150 gr por persona.... o sea, una torta para 100 personas... unos 15 kg! O sea... 3000 pesos!!!!!
(Les juro que esos números son reales) 

Vestido de novia? Mirá que salen a partir de 6500, MÍNIMO. (ahhh bueno, me caso de jean y remera entonces)

8- En internet te das cuenta de que es muy injusto haber nacido en este país. Vestidos de novia por menos de 100 dolares. Zapatos por 35 euros (Y qué zapatos!!!!)
Me cancho en las trabas a las importaciones y en la AFIP.

Por ahora no tengo más conclusiones... en breve tendré otras quejas, es un nunca acabar esto. Lo bueno es que después, cuando esté todo listo y pago... la fiesta en sí es muy probable que me haga olvidar todo este stréss... mientras tanto.... a hacer tripa corazón y darle para adelante!





sábado, 15 de febrero de 2014

La paradoja del profesional

Es bien sabido que HAY que estudiar.

Todos te lo dicen, si querés tener un futuro, tenés que estudiar, tenés que tener un título universitario.

Muchos estudiamos porque tenemos vocación, es cierto... pero también los hay que estudian en busca de ese "pase libre" al futuro que nos vienen inculcando desde chicos.

Calculo que el día de mañana, cuando ya tenga muchos años de profesión, voy a estar de acuerdo con lo que hoy considero el "mito" de ser profesional en esta, mi Argentina querida.

El mito. Si sos profesional tenés el futuro asegurado. Siempre vas a poder trabajar de "lo tuyo".

Bolaceras!!!

Primero que nada... para poder trabajar de lo tuyo, tenés que estar matriculado. Las matrículas te la otorga el colegio de profesionales que aglomera tu rubro en tu provincia... léase, colegio de psicólogos, colegio de abogados, colegio de kinesiologos, etc. La matrícula, obviamente, la tenés que pagar. Se paga la habilitación de la misma... y se paga una cuota mensual o trimestral. Esto... sólo para PODER trabajar de lo tuyo.

Además, tenés que hacer los aportes previsionales. Es decir, tenés que afiliarte a la caja de jubilaciones de tu profesión. A diferencia de los aportes que realizan a la ANSeS los trabajadores en relación de dependencia (que, por si no lo saben, es un porcentaje de lo que ganás), si sos profesional se debe abonar una cuota fija mensual de monto variable dependiendo de la caja a la que estés afiliado y de los años que tengas en la profesión (ganes 1 o 10000 pesos en ese mes, la cuota siempre la tenés que pagar). Esto, para PODER trabajar de lo tuyo.

Además, dependiendo de tu profesión y el reglamento que debas cumplir, debes afiliarte a la obra social  que te corresponda (depende del lugar, en algunos es obligatorio, en otros es opcional), abonando, cómo no!, otra cuota mensual. Esto, para PODER trabajar de lo tuyo.

Además, tenés que inscribirte en el monotributo. Está bien, es poca plata lo que tenés que pagar, porque ya estás haciendo aportes jubilatorios y de obra social por otro lado, pero sigue siendo una cuota mensual más.

¿Ya tenés todo pago? Ahora sí podés empezar a trabajar de lo tuyo.

Porque me imagino que venís de una familia que se especializa en la profesión que elegiste, por lo tanto, podés empezar a trabajar en su estudio, clínica o consultorio.

Si, como yo, no tenés una familia que se dedicó a "lo tuyo", se vienen más problemas.

Hay dos opciones:
       1- Trabajar para alguien más.
       2- Independizarte.

Si tenés la suerte de vivir en Capital Federal, la opción 1 es muy viable, puesto que a diario requieren servicios de profesionales de todo tipo, en innumerables sitios de empleo, periódicos y demás.
Si no vivís en Capital... la cosa se pone un poco más dura. Ayer fui a una entrevista para trabajar en un estudio jurídico en la ciudad de Rosario. El aviso que solicitaba abogados fue el único que he visto en los últimos 4 meses. La entrevistadora comentó que recibió más de 2500 currículums. Traducimos esto: en la ciudad de Rosario hay un mínimo de 2500 abogados que buscan empleo y hay un solo puesto vacante. Hay 2500 abogados que deben pagar todas sus cuotas, pero que siguen buscando empleo.

La opción 1 es difícil. Probemos con la opción 2. Independizarte y montar tu propio negocio es, sin dudas, el sueño del pibe. No responder ante nadie, salvo tus clientes y tu ética profesional es lo mejor que puede ocurrirnos. Para esto, se necesita dinero. En primer lugar, debemos conseguir un espacio físico en el cual atender a nuestros clientes. El costo de este espacio físico puede variar según si alquiles una oficina de manera mensual o si alquilás un consultorio por horas. Pero sin dudas, es una cuota más que hay que pagar. Además, está el temita de "conseguir los clientes". Si uno trabaja para otro, los clientes los proporciona el empleador. Pero si uno tiene un estudio propio, uno debe procurarselos por sí mismo. Una vez que arrancaste, si trabajás bien, llegan solos, el boca a boca es esencial. Pero el arranque es lo complicado. Los primeros clientes propios son como las figuritas difíciles, pero en un álbum que sólo tiene figuritas difíciles.

Hablo de los abogados, porque es lo que me toca, pero la realidad del profesional joven en la Argentina es para todos igual.

Conozco una psicóloga que trabaja de recepcionista de un sanatorio, los costos de mantener la matrícula, más la caja, más la obra social y el monotributo, es de casi dos mil pesos mensuales. Si le sumamos un consultorio alquilado (bien baratito), para poder trabajar "de lo suyo" tiene que arrancar el mes con 3 lucas para atrás. "Me conviene trabajar acá".

Sé de una kinesióloga que para poder sacar su matrícula y afiliarse a su caja de jubilaciones, tuvo que pagar más de 9000 pesos. Esto... para PODER trabajar de lo suyo. Ella dice.... "yo porque tengo a mis viejos que me pagaron esa plata, que si no, no podía".

Ser profesional es lo que tiene futuro dicen.

Nadie habló de que tuviera presente.


viernes, 31 de enero de 2014

La impostora

Antes de leer esto tener en cuenta:
1- No, no estoy deprimida.
2- No, creo que no estoy loca.
3- Soy una persona bastante feliz.
4- No, no hago terapia.
Listo, ahora sí pueden leerlo.

Cuando estaba en mi más temprana pubertad era bastaaaaante boludita. Y también un poco durante la adolescencia. Pensándolo bien, nunca dejé de serlo del todo, pero uno se las apaña para mantener la boca cerrada más tiempo y así, parecerlo un poco menos.

Como iba diciendo, era bastante boludita. Y el paso de la redondez infantil (adorable) a la redondez adolescente (no tan adorable) no fue un paso grácil, sino más bien, digamos, un tanto pesado.

La primera vez que me di cuenta que no encajaba fue en el cumpleaños  número 12 de una de mis compañeras de la secundaria (la Flaca). En ese momento debía de tener unos 11 años, y yo era una niña. Me refiero a que era una niña de verdad.... fui al cumpleaños con un flamante conjunto de jogging gris, con la idea de que era un cumpleaños, y que iba a chivatear, jugar a las escondidas o a la bruja de los colores o a algo que implicara correr (con la consabida posibilidad, para las personas como yo, de caerse). Y cuando llegué todas mis compañeritas estaban vestidas como adolescentes. Minis de jean, jumpers y demás. Y nadie quería jugar a juegos de nenes. Había música, y todos bailábamos en círculo, y hasta jugamos al "semáforo" (juego machista si los hay, viendo hoy en perspectiva) que implicaba que debíamos dar un beso al que pretendía pasar por nuestra parada. De más está decir que me sentí fuera de lugar. Yo empecé a actuar como una preadolescente y no como una niña.

Una de las consecuencias de ser, como dije, bastante boludita durante esta etapa de la vida, es que siempre hay alguno que te lo hace saber. Y la secundaria es una etapa horrible para ser diferente. Que si sos muy alto, que si sos muy feo, que si sos muy gordo, que si sos muy pavo. Y pasé varios años escuchando éstos y otros motes.

Y, lo peor, creyéndolos.

Así fue que me supe fea y gorda y tonta.

Con el correr de los años, uno se endurece. Y llegando a los 15 años, pese a seguir escuchando mil veces lo gorda y fea y tonta que era, la verdad es que me empezó a chupar un huevo. Y me empecé a aislar. Me encerré sobre mí misma, sólo hablando con un par de amigos. Ignorando al resto.
Me encontré con que había otras personas que tampoco encajaban (ninguna con tanto estrépito como yo, he de admitir) y que entre parias podíamos hacernos compañía. Hasta que llegó un punto en que ya no me importaba. O, por lo menos, aparentaba que no importe. Yo empecé a actuar como una isla.

Cuando fui más grandecita empecé a sospechar que tan fea no debía ser, puesto que muchas veces me decían lo hermosa que era. Lo bueno de haber actuado como una isla durante tantos años, es que tuve mucho tiempo para leer, lo cual hizo que se me pasara un poco lo tonta, y, por lo menos, fuera un poquititito interesante cuando abriera la boca para hablar. Lo malo de haber actuado como una isla, fue que me faltaba interacción social. Y cuando alguien decía quererme y desear pasar tiempo conmigo, yo lo creía de pé a pá. Así fue que terminé en relaciones desastrosas con personajes impresentables, para luego, terminar sola, pseudoenganchada con el muñeco de turno, convencida de que los hombres eran todos idiotas y que el próximo iba a ser diferente. Y empecé a actuar como una mujer desencantada.

Hasta que me encontré.
Me di cuenta de que en realidad no era ni fea ni tonta (gorda sí, pero buehhh) ni una isla ni una mujer desencantada. Me acepté como una mezcla nefasta de humor infantil, ñoñez, honestidad brutal, sonrisa fácil, simpatía natural, paciencia casi nula y carácter fuerte.  Me vi hermosa, a mi propia manera. Y empecé a actuar como soy.

Pero basta con que un palito se cruce en el camino de la propia autoestima para plantearte si es verdad que ese sos realmente vos.
Hoy, por unas hormonas y algunos minutos, me sentí fea. Y las sensaciones que debían de estar olvidadas muchos años atrás resurgieron inmediatas. Y me sentí nuevamente fea y gorda y tonta. Fueron unos minutos de bajón, que se pasaron en seguida, cuando me recordé a mí misma quién soy.
Y me surgió la teoría de la impostora, que da título a este (largo) post.

La teoría de la impostora implica que uno no es lo que hace. Implica que uno debe, por mecanismos de defensa y de presión (social, económica, etc) actuar de determinada manera, hasta que empieza uno mismo a ser de esa manera. Hasta que ya no pueda serlo más, momento en que deberá empezar a actuar de otra forma, que luego determinará que se imposte como tal.

La teoría de la impostora implica que ya no sé si realmente soy quien soy porque es mi esencia, o porque estoy impostando ser esto, pero en realidad, soy algo más.

¿Realmente es mi vida la que estoy viviendo? ¿O estoy aparentando ser quien soy, pero, en esencia, soy diferente, sólo que aún no me he encontrado?

¿Soy yo o soy una impostora?

lunes, 13 de enero de 2014

Campanas

Dicen que cuando uno tiene una pérdida muy grande en la vida, se da cuenta de las cosas realmente importantes.
Se da cuenta de que no importa tanto tener el mejor de los empleos, ni la mejor de las profesiones, ni la mejor de las reputaciones.
Se da cuenta de que lo único importante que hay en esta vida, es la gente a la que uno ama.
La gente que necesitamos.
La gente que le pone significado a cada uno de los días que nos toca vivir.

Y cada día, independientemente de las enfurruñadas y los enchinchamientos cotidianos, me despierto a su lado y lo saludo con un te amo.
Y cada noche, me besa los ojos y me repite una y otra vez que me ama, sin importar si llueve o hace calor, o si el país se incendia.
¡Qué manera tan deliciosa de dormir!

Y cada día nos besamos, y nos amamos y nos miramos a los ojos y nos encontramos.
Y nos hacemos felices, casi sin intentarlo.
¡Qué manera tan deliciosa de vivir!

Y nos dimos cuenta de que esto es lo que queremos y necesitamos y lo único que realmente importa.
Y nos dimos cuenta de que si vivimos así, ya no le tememos a la muerte, porque cada día es mejor que el anterior. El mejor.

Por todo eso, suenan campanas.
A lo lejos, en un par de meses, las haremos sonar por nosotros.







sábado, 4 de enero de 2014

La vida sigue

Aunque pareciera que te quitaron el aire, te pararon el tiempo, sacaron el piso en que te apoyabas... nada de eso pasó realmente.

Uno quiere gritarle al viento que deje de soplar, que paren el mundo, que pido gancho que no quiero jugar más.

Pero no.
El mundo y la vida y el tiempo y el viento y todo sigue.

Y uno, descarnado, en el medio de un campo grita sin voz ni silbido ni ruido ni aire.

Paren.

No quiero más.

Y el viento hace bolsa en tu boca abierta. Ruido sordo.

Y ves a las mariposas y los bichos y los gusanos y las aves y los perros y las moscas. Y no están parados, quietos, sin tiempo, como uno.

Todos siguen sin mirarte. Sin notar tu hueco. Sin escuchar tu silencio, tu falta de ruido.

Y el campo se expande hasta el infinito.

Y hay pájaros.

Y otros que gritan en silencio. Van apareciendo otros cuerpos que miran alrededor. Como uno.

Y más pájaros. Libres. Vuelan y se van de este campo.

Y los otros también miran a los pájaros. Si vuelan, el tiempo no paró.

Devuélvanme la piel. Devuélvanme la voz. Devuélvanme el tiempo a mí también.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Eternidad

Mamá se fue el 20 de noviembre, a las 20.45 hs.

Se llevó con ella su mirada que te decía cosas sin necesidad de una sola palabra, nos dejó en los ojos su determinación y fuerza.
Se llevó su sonrisa fácil y liviana y nos dejó muchas historias y anécdotas plagadas de risas.
Se llevó sus abrazos pero nos dejó a todos juntos, abrazados, un equipo.

Se fue, pero está acá.
Cada vez que me miro en el espejo, la veo. Cada vez que me enojo la siento en mi sangre, metiéndome su fuego en las venas. Cuando cocino me habla en las recetas que eran de ella, y ahora, todas mías. Cuando me río, cuando lloro.


Se fue, pero está en mí.
En mis hermanos.
En papá.

Para siempre.


miércoles, 13 de noviembre de 2013

Historias de la sala de espera II - Maru y Juan

 Me imagino trabajando en una terapia intensiva y me dan escalofríos. Siempre atentos, siempre alertas, la muerte dando vueltas a tu espalda todo el tiempo... peleando por la vida de un desconocido, mano a mano, a ciegas y sin plan B.

 Creo que muy pocas cosas hay que puedan sorprender ya a un enfermero de terapia. Lo han visto todo... o casi todo.

Juan estaba dormido. Le habían hecho una biopsia en el cerebro para ver qué le causaba esa somnoliencia, ese desconecte de la realidad. Los peores diagnósticos ya habían pasado volando de boca en boca de los médicos, que tumor, que inoperable, que lesiones cerebrales. Juan seguía dormido. Un drenaje mantenía los líquidos cerebrales en un nivel coherente. Pero Juan estaba dormido.

Maru es la esposa de Juan desde hace poco más de un año. Lleva a su cuello un rosario de piedras azules y varias cruces que la protegen. En su rostro una sonrisa contagiosa y amigable.

Las enfermeras de la noche, a veces, si la terapia está tranquila, te dejan quedarte un rato más de esa efímera hora en la que se permite visitar a los internados. Esa noche la terapia estaba tranquila.

Maru estaba, después de hora, parada al lado de Juan, mientras él dormía sosteniéndole una mano. El trajín de las enfermeras  cesó momentáneamente, los únicos sonidos eran los pips de los monitores, y la voz de Maru. Las enfermeras dejaron de trabajar, para escucharla. Levantaron la vista, para robarse la escena, quemada en sus memorias para siempre. Sus manos laboriosas detenidas en el aire unos segundos, escuchando la plegaria de amor de ellos...

Amor mío, si me escuchas, move los ojos. Amor, si me escuchas sonreí. Amor por favor mirame, move los ojos, apretame la mano. Amor por favor mirame. Si me escuchas mirame. Si me escuchas, amor, move los ojos. Escuchame, sonreí, mirame. Amor, por favor escuchame. Move los ojos. Mové los dedos. Escuchame. Mirame.

Un instante eterno de mutismo, una alarma de un monitor.

El encantamiento había pasado, las enfermeras retomaron su labor.

El lunes pasado Juan y Maru se fueron de alta. Su bello durmiente, despertó.